Parece crecer un año tras otro la demanda por las pérgolas bioclimáticas, y ¿quién se puede extrañar?  Permiten al usuario disfrutar todo el año de lo mejor del tiempo, con la posibilidad de variar la cantidad de luz del sol que entra a través del techo o las paredes.

La empresa Perfil Solsona, de Solsona, fabrica e instala una amplia gama de artículos en metal, PVC y vidrio, tales como instalación de ventanales, barandillas de vidrio, cerramiento de balcones, puertas, persianas, toldos – y, por supuesto, pérgolas bioclimáticas.  Utilizan un elevador GUIL de la gama TORO A para levantar las vigas – que pueden medir 5 metros o más de largo – hasta la altura adecuada y sostenerlas en el sitio mientras se fijan en su emplazamiento.

Los elevadores TORO Serie-A de GUIL tienen una capacidad máxima de carga de 170 kg y una altura máxima de elevación de más de 4 metros, y son ligeras y manejables, permitiendo posicionar cada viga con precisión para su ensamblaje.  Son fáciles de transportar, de montar y operar, y caben fácilmente en una furgoneta con su altura plegada de 175cm.  Gracias a su sistema de carga frontal a nivel de suelo, con las horquillas a solo 30cm del suelo, la carga puede colocarse sobre las horquillas con el mínimo de esfuerzo, y elevarse a la altura requerida en solo un minuto o dos.  Esto hace que el montaje sea más seguro y sencillo, y requiera de menos tiempo en el montaje que con métodos más tradicionales.